Aquí la Emperatriz es una reina alada que sostiene el cetro de un dominio representado por la aureola estrellada y los cuernos de la Luna; es el océano de las aguas superiores, en las que reside la sabiduría suprema. El blasón de esta “Virgen celeste” es un águila de plata, símbolo del alma sublimada en la espiritualidad y elevada a los cielos. El lirio representa el embrujo ejercido por la pureza y la belleza. Esta soberana resplandeciente, afirma Wirth, representa la inteligencia creativa, la ciencia, el estudio, la abundancia y la fecundidad.
domingo, 28 de noviembre de 2010
Tarot Crowley: El Enamorado
El mago inglés quiere representar en esta carta las nupcias alquímicas de El Emperador y la Emperatriz, el rey negro y la reina blanca, símbolos de las tensiones interiores en oposición. Sobre ellos aparece dominante la encapuchada e imponente figura del oficiante, El Ermitaño, el individuo que ha resuelto todas las oposiciones en su interior. Bajo las manos extendidas del oficiante se manifiestan los “hijos” de esta unión, que cruzan las manos en un brindis de la buenaventura, mientras a sus pies se levanta la serpiente del conocimiento.
Tarot Papus: La Torre
El decimosexto arcano, la Torre Fulminada, representa, según Papus, la materialización de la energía espiritual y el nacimiento del mundo visible, de donde se deriva la idea de caída. En efecto, desviándose un poco de la interpretación de Pitois, que, sin embargo, fue su inspirador, Papus explica que la Maison Dieu representa bien el descenso del Espíritu Santo al mundo, bien la caída de Adán y Eva. Además, el cabalista francés liga este arcano a la letra hebraica ayin, que expresa “todo lo que es torcido, falso y perverso”.
viernes, 26 de noviembre de 2010
Seis Bastos – Seis Copas – Seis Espadas – Seis Oros
Seis Bastos
Este arcano nos enseña el verdadero sentido de la victoria conquistada a través del esfuerzo personal, como resultado de la lucha y de la capacidad de afrontar un riesgo. Representa el premio después del esfuerzo, así como al hombre capaz de llegar a situaciones límite para conquistar sus metas, renunciando desde el principio a la comodidad y poniendo en peligro su seguridad con tal de conquistar sus objetivos. Es el arcano de la ambición y de los ideales que hacen que un hombre luche hasta la muerte, incitándole a convertirse en un líder capaz de arrastrar a las masas con su ímpetu. Es la carta del guerrero, tanto del mundo como del espíritu.
Seis Copas
Este arcano nos enseña el verdadero sentido de la frase bíblica “Si no os volvéis como niños no entraréis en el reino de los cielos”. Así, se revela el sentido de ser niño, no sólo como regreso a la inocencia, sino también por ver la vida como un juego sagrado y a los demás como a los compañeros de juego que el destino nos ha deparado. Este estado de infancia permite al hombre valorar las emociones y los pensamientos que la vida le proporciona por encima de los bienes materiales que pueda acumular, incitándole además a vivir el juego de la vida con alegría, ingenuidad y de manera atemporal, uniendo el pasado con el futuro a través del bienestar del presente.
Seis Espadas
Con el seis de espadas aprendemos a buscar algo mejor. Es el arcano del movimiento y de los viajes, pero no de placer, sino de los que se emprenden para encontrar nuevas oportunidades que nos permitan progresar cuando, en nuestro entorno habitual, ya no hay posibilidad de ello. Sin embargo, no se trata de una huida ni de una decisión irresponsable, sino del inicio de una búsqueda que lleva al hombre hacia algo mejor. Por ello esta carta representa a los emigrantes, los pioneros o los peregrinos, pues todos ellos buscan mejorar, ya sea por causas económicas, por afán de la conquista o, como los últimos, por motivos espirituales.
Seis Oros
Este arcano nos muestra el verdadero sentido del éxito, entendido éste como una forma de vida en la que el triunfador es un medio a través del cual la abundancia del Universo se distribuye al resto del mundo según sus necesidades. Es el arcano de los filántropos y los mecenas, y representa a los hombres y mujeres que entienden el éxito como una forma de conseguir que todo y todos tengan cuanto precisan y de encontrar la felicidad, repartiéndola. Representa el espíritu de la solidaridad y la generosidad y nos muestra cómo alcanzarlo.
Este arcano nos enseña el verdadero sentido de la victoria conquistada a través del esfuerzo personal, como resultado de la lucha y de la capacidad de afrontar un riesgo. Representa el premio después del esfuerzo, así como al hombre capaz de llegar a situaciones límite para conquistar sus metas, renunciando desde el principio a la comodidad y poniendo en peligro su seguridad con tal de conquistar sus objetivos. Es el arcano de la ambición y de los ideales que hacen que un hombre luche hasta la muerte, incitándole a convertirse en un líder capaz de arrastrar a las masas con su ímpetu. Es la carta del guerrero, tanto del mundo como del espíritu.
Seis Copas
Este arcano nos enseña el verdadero sentido de la frase bíblica “Si no os volvéis como niños no entraréis en el reino de los cielos”. Así, se revela el sentido de ser niño, no sólo como regreso a la inocencia, sino también por ver la vida como un juego sagrado y a los demás como a los compañeros de juego que el destino nos ha deparado. Este estado de infancia permite al hombre valorar las emociones y los pensamientos que la vida le proporciona por encima de los bienes materiales que pueda acumular, incitándole además a vivir el juego de la vida con alegría, ingenuidad y de manera atemporal, uniendo el pasado con el futuro a través del bienestar del presente.
Seis Espadas
Con el seis de espadas aprendemos a buscar algo mejor. Es el arcano del movimiento y de los viajes, pero no de placer, sino de los que se emprenden para encontrar nuevas oportunidades que nos permitan progresar cuando, en nuestro entorno habitual, ya no hay posibilidad de ello. Sin embargo, no se trata de una huida ni de una decisión irresponsable, sino del inicio de una búsqueda que lleva al hombre hacia algo mejor. Por ello esta carta representa a los emigrantes, los pioneros o los peregrinos, pues todos ellos buscan mejorar, ya sea por causas económicas, por afán de la conquista o, como los últimos, por motivos espirituales.
Seis Oros
Este arcano nos muestra el verdadero sentido del éxito, entendido éste como una forma de vida en la que el triunfador es un medio a través del cual la abundancia del Universo se distribuye al resto del mundo según sus necesidades. Es el arcano de los filántropos y los mecenas, y representa a los hombres y mujeres que entienden el éxito como una forma de conseguir que todo y todos tengan cuanto precisan y de encontrar la felicidad, repartiéndola. Representa el espíritu de la solidaridad y la generosidad y nos muestra cómo alcanzarlo.
martes, 23 de noviembre de 2010
El Ermitaño – Una pincelada…
La carta del Ermitaño plantea un giro absoluto en el proceso de crecimiento del individuo que se traduce en la búsqueda interior. Así, si la presencia de arcanos anteriores indica que el hombre ha ido forjando su personalidad hasta alcanzar un notable conocimiento de las leyes que rigen la vida, tanto personal como social, al penetrar en el arcano IX el joven vuelve la vista hacia su fuero interno, pues ha de descubrir quien es en realidad.
El Ermitaño representa al hombre que ha alcanzado la madurez psicológica, entendida ésta como un estadio evolutivo que pueda llegar a cualquier edad, en el que la persona siente que los logros humanos y sociales conquistados hasta el momento son insuficientes para alcanzar la plena madurez; por tanto, decide orientar su vida hacia un nuevo objetivo: el conocimiento del espíritu.
Este arcano es la imagen simbólica de Saturno o Cronos, el señor del tiempo que devora a sus hijos en la mitología clásica, y nos habla de la ley por la cual todo aquel que entre en el juego de la vida en cualquier línea temporal está sujeto a los cambios producidos por su transcurrir y, por tanto, a la vejez y la muerte. Asimismo, está vinculado a la imagen del filósofo griego Diógenes, que caminaba a pleno día con una linterna encendida exclamando: “Busco a un hombre”; y es que el Ermitaño representa esa búsqueda que conduce al hombre hasta su verdadera meta, la de convertirse, gracias a la intervención de la “lámpara del espíritu”, en un verdadero hombre.
El Ermitaño representa al hombre que ha alcanzado la madurez psicológica, entendida ésta como un estadio evolutivo que pueda llegar a cualquier edad, en el que la persona siente que los logros humanos y sociales conquistados hasta el momento son insuficientes para alcanzar la plena madurez; por tanto, decide orientar su vida hacia un nuevo objetivo: el conocimiento del espíritu.
Este arcano es la imagen simbólica de Saturno o Cronos, el señor del tiempo que devora a sus hijos en la mitología clásica, y nos habla de la ley por la cual todo aquel que entre en el juego de la vida en cualquier línea temporal está sujeto a los cambios producidos por su transcurrir y, por tanto, a la vejez y la muerte. Asimismo, está vinculado a la imagen del filósofo griego Diógenes, que caminaba a pleno día con una linterna encendida exclamando: “Busco a un hombre”; y es que el Ermitaño representa esa búsqueda que conduce al hombre hasta su verdadera meta, la de convertirse, gracias a la intervención de la “lámpara del espíritu”, en un verdadero hombre.
lunes, 22 de noviembre de 2010
Tarot Wirth: La Sacerdotisa
Sacerdotisa del misterio, patrona del arte adivinatorio, la Sacerdotisa de Wirth reúne elementos de varias tradiciones religiosas. Sentada sobre una esfinge alada, sujeta un libro en cuya cubierta aparece el círculo chino del yin-yang, símbolo de la armonía de los opuestos. Las llaves que sostiene en su mano izquierda representan los símbolos intelectuales que proporcionan el acceso a los misterios de la fe y a una nueva dimensión espiritual. Más allá del velo de las apariencias se atisba la entrada del Templo de Salomón, que aquí aparece como una imagen de la logia masónica de la que Wirth era iniciado.
Tarot Crowley: El Papa
Es el conservador de las leyes cósmicas y de los dogmas religiosos. Su cuerpo está inscrito en una red de líneas que forman las estrellas mágicas de cinco y seis puntas. La naturaleza del Papa es la del Tauro zodiacal, pero su dominio supera el elemento Tierra. Entre sus piernas emerge la sombra de una mujer que representa la unión con la Sacerdotisa, de la que nace el niño que se mueve en el interior de la estrella: es el mismo Papa, transmutado interiormente gracias a la “fecundación alquímica”.
Tarot Papus: El Diablo
Desde el punto de vista iconográfico, el Diablo de Papus se inspira en el dibujado por Eliphas Lévi en el frontispicio del libro “Dogma y ritual de la Alta Magia” (París 1855 – 56), y fue recogido también con más o menos fidelidad por Oswald Wirth. Papus unió este arcano a la letra hebraica samech, que, según él, expresa jeroglíficamente el movimiento circular de una flecha. De aquí nace la idea de un círculo insuperable, representación del destino y del tiempo que circunscriben la voluntad humana, limitando su campo de acción.
domingo, 21 de noviembre de 2010
Tarot Wirth: El Mago
El ocultista suizo dio un giro importante a las cartas de Tarot cuando cambió la tradicional imagen del prestidigitador por la de un adepto a la Magia Trascendental, que muestra los símbolos de su oficio: la copa de los sacrificios rituales llena de sangre, el pentáculo por medio del cual se dominaban las fuerzas de la naturaleza, el bastón para captar y dirigir los efluvios del ambiente, la espada de acero que se emplea para cortar y dividir. Entre los principios sugeridos por Wirth queda subrayado el “principio de autocreación”, es decir, la capacidad de actuar sobre uno mismo y sobre el mundo por medio de la magia.
Tarot Crowley: El Emperador
Este soberano, vestido de rojo fuego y oro, es definido por Crowley como el Sol matutino. El mago inglés adapta aquí las interpretaciones alquímicas precedentes que hacen de este arcano el símbolo del azufre filosófico.
Crowley estaba de acuerdo también en la personificación del carnero (Aries) mitológico y zodiacal, es decir, la capacidad de fecundar la Madre Tierra. Una novedad importante es la inclusión del carnero divino (Agnus Dei), hijo solar del carnero, dibujado de manera similar a la letra hebrea tzaddi, de lo que derivan complejas elucubraciones cabalísticas.
Crowley estaba de acuerdo también en la personificación del carnero (Aries) mitológico y zodiacal, es decir, la capacidad de fecundar la Madre Tierra. Una novedad importante es la inclusión del carnero divino (Agnus Dei), hijo solar del carnero, dibujado de manera similar a la letra hebrea tzaddi, de lo que derivan complejas elucubraciones cabalísticas.
sábado, 20 de noviembre de 2010
Tarot Papus: La Templanza
Esta figura se mantiene sin variación respecto a la tradición del Tarot, pero la escuela cabalística a la cual se refería Papus ligaba la Templanza con la letra hebraica nun, expresión jeroglífica de la producción femenina: un hijo, un fruto o algún ser vivo. Más exactamente, según Papus, el arcano XIV simboliza la entrada del espíritu divino en la materia y la reacción de la materia a través del espíritu; de este modo, se renueva el milagro de la generación, sea espiritual, intelectual o física.
Tarot Crowley: La Emperatriz
Esta seductora figura representa la armonía del Universo y del amor gozoso. Su cetro, un tallo de loto de pétalos azules, es una clara alusión a la sensualidad femenina, lo mismo que la corona lunar que luce sobre la cabeza y las dos lunas que gravitan a su alrededor. Hay en la carta un gorrión y una paloma, aves muy estimadas por Afrodita, la diosa griega del amor. A sus pies se encuentra acurrucado un pelícano, símbolo de la regeneración. El águila blanca bicéfala que adorna el escudo se refiere a la incorruptible pureza de esta encarnación de la Gran Madre.
jueves, 18 de noviembre de 2010
Cinco Bastos – Cinco Copas – Cinco Espadas – Cinco Oros
Cinco Bastos
El cinco de bastos incorpora a nuestro bagaje la capacidad de aceptar retos.
Manifestación de la lucha por la existencia, representa un hecho que se produce en todas las áreas de la vida y que nos permite sobrevivir. Es la competencia que impulsa al hombre a ir más allá de sus límites y luchar por un lugar preeminente en la jerarquía social, y que le impulsa a medir sus fuerzas con sus adversarios en todos los campos, ya sea laboral, deportivo o intelectual, buscando como recompensa la satisfacción de haberse superado a sí mismo.
Cinco Copas
La lección que nos plantea este arcano tiene que ver con el placer y con el dolor que produce su pérdida, aunque también hace referencia al sentimiento de culpa que se genera cuando uno teme que el placer venga cargado de maldad. Es, a la vez, el dolor que se desencadena cuando un afecto termina y el temor que convierte en culpa el placer que se ha vivido. Este arcano debería enseñarnos que los sentimientos tiene un periodo de actividad y que, cuando terminan, no hay que caer en la melancolía ni en el odio, polaridad contraria al amor. Asimismo, nos muestra la necesidad de asumir nuestros actos sin volver nunca la vista atrás.
Cinco Espadas
Todos los arcanos menores representan lecciones concretas. El cinco de espadas nos enseña que lo imprevisto puede irrumpir en la vida y desbaratar los planes que hayamos podido concebir, dejando sensación de pérdida y derrota. Implica la lección del desapego y representa al hombre realizando proyectos perfectamente planificados, que se desbaratan por una acción externa a su voluntad, pues no encajaban con el gran plan del Universo. El dolor que resulta de la sensación de pérdida es el maestro que poco a poco ensaña al hombre a vivir el presente sin apegos ni expectativas y sin dejarse llevar por las apariencias.
Cinco Oros
El arcano del cinco de oros nos ensaña la lección de la pobreza, pero entendida no sólo como la carencia de dinero, sino como una actitud que impide al hombre darse cuenta de que el Universo es un lugar abundante y de que la vida tiene de sobra para todos. Así pues, lo que en apariencia es una época de ruina puede convertirse en una nueva oportunidad que la vida nos brinda para superarnos y, a menudo, un poco de confianza es suficiente para encontrar la solución. Este tipo de pobreza psicológica también afecta a los que poseen riquezas pero que siguen sintiéndose pobres, lo que les convierte en verdaderos miserables.
El cinco de bastos incorpora a nuestro bagaje la capacidad de aceptar retos.
Manifestación de la lucha por la existencia, representa un hecho que se produce en todas las áreas de la vida y que nos permite sobrevivir. Es la competencia que impulsa al hombre a ir más allá de sus límites y luchar por un lugar preeminente en la jerarquía social, y que le impulsa a medir sus fuerzas con sus adversarios en todos los campos, ya sea laboral, deportivo o intelectual, buscando como recompensa la satisfacción de haberse superado a sí mismo.
Cinco Copas
La lección que nos plantea este arcano tiene que ver con el placer y con el dolor que produce su pérdida, aunque también hace referencia al sentimiento de culpa que se genera cuando uno teme que el placer venga cargado de maldad. Es, a la vez, el dolor que se desencadena cuando un afecto termina y el temor que convierte en culpa el placer que se ha vivido. Este arcano debería enseñarnos que los sentimientos tiene un periodo de actividad y que, cuando terminan, no hay que caer en la melancolía ni en el odio, polaridad contraria al amor. Asimismo, nos muestra la necesidad de asumir nuestros actos sin volver nunca la vista atrás.
Cinco Espadas
Todos los arcanos menores representan lecciones concretas. El cinco de espadas nos enseña que lo imprevisto puede irrumpir en la vida y desbaratar los planes que hayamos podido concebir, dejando sensación de pérdida y derrota. Implica la lección del desapego y representa al hombre realizando proyectos perfectamente planificados, que se desbaratan por una acción externa a su voluntad, pues no encajaban con el gran plan del Universo. El dolor que resulta de la sensación de pérdida es el maestro que poco a poco ensaña al hombre a vivir el presente sin apegos ni expectativas y sin dejarse llevar por las apariencias.
Cinco Oros
El arcano del cinco de oros nos ensaña la lección de la pobreza, pero entendida no sólo como la carencia de dinero, sino como una actitud que impide al hombre darse cuenta de que el Universo es un lugar abundante y de que la vida tiene de sobra para todos. Así pues, lo que en apariencia es una época de ruina puede convertirse en una nueva oportunidad que la vida nos brinda para superarnos y, a menudo, un poco de confianza es suficiente para encontrar la solución. Este tipo de pobreza psicológica también afecta a los que poseen riquezas pero que siguen sintiéndose pobres, lo que les convierte en verdaderos miserables.
martes, 16 de noviembre de 2010
Tarot Papus: La Muerte
Asimilando La Muerte a la letra hebraica mem, jeroglífico de la mujer y símbolo materno y femenino, Papus desdramatizó el contenido de esta carta, atribuyéndole un valor creativo y de regeneración. El docto cabalista francés decía que esta carta es la unión universal de la naturaleza, el puente entro los mundos visibles e invisibles, la luz astral que habita en las diversas dimensiones, y el “principio transformador universal” del que sólo los iniciados conocen el misterio.
La Justicia – Una pincelada…
Con el arcano de La Justicia nos internamos en la etapa de la madurez humana. Representa al ser humano que comprende las leyes Universales y actúa en consecuencia, favoreciendo así sus propósitos evolutivos tanto en el plano personal como social. Si en el arcano anterior, El Carro, el hombre toma las riendas de su vida para dirigir sus pasos con total libertad hacia sus propias metas, con La Justicia el hombre se enfrenta a las consecuencias de sus actos, y aprende que cualquier acción que inicie afecta al resto de la creación y, tarde o temprano, los efectos de dicha acción volverán a él, a fin de que se cierre el circuito energético y se restablezca el equilibrio.
Este arcano expresa la idea de Karma entendida como la ley universal que hace justicia cósmica y humana, equilibrando cada acción con una reacción del mismo signo.
La carta, que representa el arcano número VIII, recupera el gran tamaño de los personajes centrales de los primeros arcanos, como La Sacerdotisa o El Emperador, quizá porque en ella no se nos muestra al hombre en su empeño por andar el camino de la Sabiduría, sino la figura arquetípica de Ley Cósmica, que mantiene el delicado equilibrio de la vida en este planeta.
sábado, 13 de noviembre de 2010
Tarot Crowley: La Sacerdotisa
Al igual que para Papus, para Crowley también La Sacerdotisa es un retrato de Isis o, para ser más precisos, de uno de los tres aspectos arquetípicos de la Gran Diosa: su forma más espiritual, la Virgen Eterna, la Verdad Escondida, la idea intemporal que se halla dentro de todas las formas. En sus manos sostiene una red confeccionada con tinieblas y luz que representa la energía que, entrelazándose en el cosmos, forma el velo de la ilusión. La saeta de luz que tiene sobre su regazo es, según el mago británico, el sendero que comunica directamente las esferas superiores con el mundo material.
Tarot Papus: El Colgado
Como otros ocultistas franceses, Papus vio en la figura del Colgado el triángulo invertido cubierto con una cruz, símbolo alquimístico del azufre y de reconocimiento de los caballeros de la Rosacruz, así como del grado 18 de la masonería escocesa. Además, Papus relacionó esa carta con la letra hebrea lamed, expresión jeroglífica de un brazo: de ahí la idea de expansión potencial de la voluntad en cualquier dirección. Esta carta, afirmaba, sirve de aviso a los audaces, indicándoles la necesidad que tienen de respetar las leyes divinas.
jueves, 11 de noviembre de 2010
Tarot Crowley - El Mago
El Mago de Crowley toma el aspecto de Mercurio, el mensajero de los dioses, que gracias a sus pies alados se lanza al infinito. Se encuentra rodeado por los símbolos de su poder: la vara de la creación; la copa de la conservación; el puñal de la destrucción; la moneda, que representa el precio de la rendición. Detrás del Mago aparece el caduceo hermético, símbolo del triunfo sobre las fuerzas opuestas. El simio que aparece en la parte inferior representa el dios egipcio Thot.
El Carro – Una pincelada…
El arcano del Carro, nos conduce por la vía de la construcción de nuestra personalidad. Representa al hombre que, con el poder de su voluntad, dirige el vehículo que le permitirá abrirse camino en la vida.
Si en El Enamorado el hombre ha aprendido a discernir cuál es el camino correcto, en el Carro emprende victorioso la marcha, apoyándose en la personalidad que ha construido y que le servirá para mostrarse al mundo y relacionarse con él. Este arcano corresponde al número VII, simbolizando con ello el dominio de lo espiritual sobre lo material, y esta idea se refuerza con la figura geométrica de un triángulo formado por los brazos y la cabeza del auriga, símbolo del espíritu, dominando el cuadrado que describe el carro, representación de la materia.
Si en El Enamorado el hombre ha aprendido a discernir cuál es el camino correcto, en el Carro emprende victorioso la marcha, apoyándose en la personalidad que ha construido y que le servirá para mostrarse al mundo y relacionarse con él. Este arcano corresponde al número VII, simbolizando con ello el dominio de lo espiritual sobre lo material, y esta idea se refuerza con la figura geométrica de un triángulo formado por los brazos y la cabeza del auriga, símbolo del espíritu, dominando el cuadrado que describe el carro, representación de la materia.
Tarot Papus: La Fuerza
El cabalista francés subrayó la idea de fuerza y vitalidad expresadas en esta figura por medio de dos elementos fundamentales: las manos que cierran la boca del león y el aura que sobrevuela sobre la cabeza de la joven. Papus asimiló La Fuerza a la letra griega caph, que jeroglíficamente expresa una mano en el momento de coger una cosa, y la definió como “imagen de la potencia dada por la ciencia sagrada aplicada con justicia”. El número 11 significaría una especia de muelle que recibe y restituye la energía.
martes, 9 de noviembre de 2010
Tarot Etteilla: El Loco
Un juglar vestido con ropas variopintas camina llevando un hatillo sobre el hombro izquierdo. En la mano derecha sostiene una maza cubierta por una especie de títere que es la imagen del Loco; mientras tanto, un lince, que simboliza los instintos que someten a la razón, le muerde una pantorrilla. Esta figura es una variante de la original de Etteilla, en la que la locura humana se representaba con la figura de un hombre triste, en pie junto a una casa derruida y agredido por un felino. Sin embargo, el significado de la carta es el mismo.
Tarot Mantegna: El Loco
Esta carta, llamada aquí El Mísero, es decir, el pobre, remite a la iconografía medieval de Saturno, dios del Tiempo, entre cuyos “hijos”, como se observa en el Calendario de Baccio Baldini, también figuran los pobres, los desheredados y los presos. El personaje se parece al Loco del Tarot Visconti – Sforza, pero recuerda también al Ermitaño, representado con bastón y reloj de arena para simbolizar al que abandona los bienes terrenales y se retira a una vida solitaria, haciendo de la pobreza una elección existencial.
lunes, 8 de noviembre de 2010
Cuatro Bastos – Cuatro Copas – Cuatro Espadas – Cuatro Oros
Cuatro Bastos
El arcano del cuatro de bastos nos permite expresar nuestro poder de acción a través de la manifestación de nuestro trabajo. Representa lo que coloquialmente se conoce con la expresión “trabajar por amor al arte”, y anuncia al hombre que disfruta con lo que hace y que se siente satisfecho del resultado de su trabajo, a pesar de los esfuerzos empleados para realizar su obra. Nos proporciona la capacidad de poner cuanto somos en nuestras ocupaciones, perdiendo, de este modo, que la vida – poder se exprese en el mundo a través de nuestras obras. Asimismo, nos incita a desarrollar una facultad o capacidad hasta su máxima expresión.
Cuatro Copas
Aunque con este arcano accedemos a la satisfacción total de nuestros deseos, la carta posee un doble significado, ya que lleva consigo el concepto de estancamiento. Representa al hombre que ha conseguido sus objetivos y que, por tanto, ha perdido el gusto por la conquista y ya nada le complace. Nos proporciona el placer bajo todas sus formas, pero a la vez provoca la sensación de hastío, combinada con el temor a arriesgar lo ya conseguido. Todo ello convierte los logros humanos en una jaula de oro, donde el espíritu se encuentra atrapado e incapaz de volar.
Cuatro Espadas
Este arcano nos invita a hacer un alto en el camino, una tregua en mitad de la batalla cotidiana para trazar una estrategia o recuperar las fuerzas necesarias para volver a enfrentarse al enemigo. Puede indicar un problema familiar o profesional, o exceso de responsabilidades. Representa la estabilidad mental que se consigue gracias a la fijación de las ideas. Nos proporciona un espacio para reponernos del desgaste y el estrés, ya sea de manera voluntaria o por imposición de las circunstancias. En definitiva, simboliza la calma, el refugio y la posibilidad de sanar el cuerpo y nuestra mente.
Cuatro Oros
El cuatro de oros nos muestra el verdadero sentido del poder terrenal: la acumulación de riquezas para adquirir un poder que, en realidad, no se encuentra en el metal propiamente dicho sino en la codicia de quien desea las riquezas. Por tanto, esta persona no posee el poder que surge de la fortaleza del espíritu, sino uno corrupto y oscuro, que lo aleja de su valor como ser humano, le aísla del resto de la creación y genera el miedo a perderlo todo.
El arcano del cuatro de bastos nos permite expresar nuestro poder de acción a través de la manifestación de nuestro trabajo. Representa lo que coloquialmente se conoce con la expresión “trabajar por amor al arte”, y anuncia al hombre que disfruta con lo que hace y que se siente satisfecho del resultado de su trabajo, a pesar de los esfuerzos empleados para realizar su obra. Nos proporciona la capacidad de poner cuanto somos en nuestras ocupaciones, perdiendo, de este modo, que la vida – poder se exprese en el mundo a través de nuestras obras. Asimismo, nos incita a desarrollar una facultad o capacidad hasta su máxima expresión.
Cuatro Copas
Aunque con este arcano accedemos a la satisfacción total de nuestros deseos, la carta posee un doble significado, ya que lleva consigo el concepto de estancamiento. Representa al hombre que ha conseguido sus objetivos y que, por tanto, ha perdido el gusto por la conquista y ya nada le complace. Nos proporciona el placer bajo todas sus formas, pero a la vez provoca la sensación de hastío, combinada con el temor a arriesgar lo ya conseguido. Todo ello convierte los logros humanos en una jaula de oro, donde el espíritu se encuentra atrapado e incapaz de volar.
Cuatro Espadas
Este arcano nos invita a hacer un alto en el camino, una tregua en mitad de la batalla cotidiana para trazar una estrategia o recuperar las fuerzas necesarias para volver a enfrentarse al enemigo. Puede indicar un problema familiar o profesional, o exceso de responsabilidades. Representa la estabilidad mental que se consigue gracias a la fijación de las ideas. Nos proporciona un espacio para reponernos del desgaste y el estrés, ya sea de manera voluntaria o por imposición de las circunstancias. En definitiva, simboliza la calma, el refugio y la posibilidad de sanar el cuerpo y nuestra mente.
Cuatro Oros
El cuatro de oros nos muestra el verdadero sentido del poder terrenal: la acumulación de riquezas para adquirir un poder que, en realidad, no se encuentra en el metal propiamente dicho sino en la codicia de quien desea las riquezas. Por tanto, esta persona no posee el poder que surge de la fortaleza del espíritu, sino uno corrupto y oscuro, que lo aleja de su valor como ser humano, le aísla del resto de la creación y genera el miedo a perderlo todo.
viernes, 5 de noviembre de 2010
Tarot Papus: La Rueda
Según Papus, en el mundo divino, esta figura representa el reflejo de la voluntad: la necesidad, el karma de los hindúes; en el mundo físico, representa la potencia mágica; en el mundo natural, es el reflejo del alma universal, la fuerza creadora absoluta que está a punto de manifestarse después de haberse diferenciado del fluido animador universal. Cabalísticamente, La Rueda está ligada a la letra hebrea yod, expresión jeroglífica del dedo humano extendido para ordenar o para indicar una dirección.
Adivinación versus Clarividencia
Hace unos días alguien me preguntó si para leer el Tarot era necesario tener alguna facultad especial…concretamente preguntaba si había que ser vidente. Indiqué a nuestra amiga que desde mi óptica personal todo el mundo puede leer el Tarot…no es necesario tener ninguna facultad especial o sobrenatural. No obstante, me gustaría compartir unos extractos del libro de Joanna Watters “El Libro completo del Tarot” a modo de reflexión, que podrían ayudar a clarificar este tema.
“Existe un vínculo vital entra la adivinación y el simbolismo, y comprenderlo cambia nuestra percepción de lo que significa leer las cartas del Tarot o ser astrólogo. Estas aptitudes arcanas no se basan en la clarividencia, sino en las habilidades intuitivas y creativas que todos poseemos.”
“Adivinación y Clarividencia
El término clarividencia deriva del francés y significa “visión clara”; sin embargo, implica mucho más que una vista aguda. Si decimos que alguien es clarividente, nos referimos a que es psíquico, lo que por lo general significa que esa persona posee alguna clase de aptitud natural, no necesariamente desarrollada de forma consciente; en otras palabras, que ve, oye o sabe cosas sin que nadie se las diga ni se lo pida. Entonces entramos en el reino de la información espontánea o videncia.
La palabra adivinación deriva del latín divinare, que significa “predecir”. En la actualidad, el término se define como “predicción de eventos futuros o descubrimiento de lo que está escondido u oculto, a través de medios mágico o sobrenaturales”. La diferencia fundamental radica, entonces, en que la adivinación es un acto de consulta realizado a través de herramientas como las cartas del Tarot, la astrología, la quiromancia, los oráculos etc. Pertenece al terreno de la información solicitada o predicción.”
“Saber interpretar una tirada de Tarot no es posible gracias a las habilidades psíquicas sino al aprendizaje, es decir, a la adquisición de ciertas aptitudes. Algunas de ellas derivan del conocimiento, del aprendizaje de los significados tradicionales de las cartas; pero otras surgen del propio talento intuitivo y creativo, de aprender a pensar simbólicamente e interpretar un símbolo dentro de un contexto específico…”
Joanna Watters lo expresa muy bien… “aprender a pensar simbólicamente e interpretar un símbolo dentro de un contexto específico…”. Para mí esta es la clave.
“Existe un vínculo vital entra la adivinación y el simbolismo, y comprenderlo cambia nuestra percepción de lo que significa leer las cartas del Tarot o ser astrólogo. Estas aptitudes arcanas no se basan en la clarividencia, sino en las habilidades intuitivas y creativas que todos poseemos.”
“Adivinación y Clarividencia
El término clarividencia deriva del francés y significa “visión clara”; sin embargo, implica mucho más que una vista aguda. Si decimos que alguien es clarividente, nos referimos a que es psíquico, lo que por lo general significa que esa persona posee alguna clase de aptitud natural, no necesariamente desarrollada de forma consciente; en otras palabras, que ve, oye o sabe cosas sin que nadie se las diga ni se lo pida. Entonces entramos en el reino de la información espontánea o videncia.
La palabra adivinación deriva del latín divinare, que significa “predecir”. En la actualidad, el término se define como “predicción de eventos futuros o descubrimiento de lo que está escondido u oculto, a través de medios mágico o sobrenaturales”. La diferencia fundamental radica, entonces, en que la adivinación es un acto de consulta realizado a través de herramientas como las cartas del Tarot, la astrología, la quiromancia, los oráculos etc. Pertenece al terreno de la información solicitada o predicción.”
“Saber interpretar una tirada de Tarot no es posible gracias a las habilidades psíquicas sino al aprendizaje, es decir, a la adquisición de ciertas aptitudes. Algunas de ellas derivan del conocimiento, del aprendizaje de los significados tradicionales de las cartas; pero otras surgen del propio talento intuitivo y creativo, de aprender a pensar simbólicamente e interpretar un símbolo dentro de un contexto específico…”
Joanna Watters lo expresa muy bien… “aprender a pensar simbólicamente e interpretar un símbolo dentro de un contexto específico…”. Para mí esta es la clave.
jueves, 4 de noviembre de 2010
Tarot Etteilla: El Mundo
Una serpiente que se muerde la cola forma un círculo perfecto; en su interior, entre dos pilastras piramidales, una mujer vestida de rosa y que luce un velo azul en la cabeza sostiene una rama verde. En los ángulos están los símbolos de los cuatro evangelistas. La figura original, a la que Etteilla dio el número 5, mostraba una mujer desnuda con el pubis cubierto por un ramo de flores. A pesar de la numeración, dicha carta alude al sexto día de la Creación, en el que Dios creó un ser masculino y femenino, un andrógino, símbolo de la perfección.
Tarot Mantegna: El Mundo
Esta carta resume la estructura ptolemaica tradicional, con los círculos de las órbitas celestiales y planetarias dispuestos ordenadamente alrededor de la tierra. El nombre Primera Causa la designa como el lugar más elevado concebido por la mente humana, el Ente Supremo, que según la cosmología cristiana reside en el cielo más alto, más allá del tiempo y del espacio. Hay que destacar que en la serie S de esta baraja el autor enriqueció el significado de esta figura al añadir los símbolos de los evangelistas en los ángulos.
martes, 2 de noviembre de 2010
El Enamorado – Una pincelada…
Este arcano nos abre las puertas del libre albedrío. Representa al hombre enfrentándose a la primera elección crucial de su vida, que es escoger entre la madre o la amada, entre la autoridad tradicional o la acción independiente que le permitirá evolucionar.
También manifiesta la elección entre el bien y el mal, la virtud o el vicio, que el ser humano tiene que hacer en cada nueva encrucijada que le depara el destino. El número que corresponde a este arcano es el 6; según la escuela Pitagórica, es el número de la sexualidad y se le llama número del matrimonio. Por lo tanto, la aparición de esta arcano lleva al hombre no sólo a enfrentarse a la dura prueba de escoger su propio camino, sino también al amor como búsqueda de la plenitud con el otro.
La escena que nos muestra El Enamorado es algo distinta a la de los arcanos que le preceden. Por primera vez en la serie del Tarot la figura central, en este caso el hombre, no tiene el tamaño gigantesco y la actitud arquetípica a los que nos tienen acostumbrados, por ejemplo, El Emperador o El Papa; por el contrario, El Enamorado aparece relacionado con los otros personajes en una actitud más natural y asequible. Con ello pone de manifiesto que con él penetramos en el mundo de lo humano.
También manifiesta la elección entre el bien y el mal, la virtud o el vicio, que el ser humano tiene que hacer en cada nueva encrucijada que le depara el destino. El número que corresponde a este arcano es el 6; según la escuela Pitagórica, es el número de la sexualidad y se le llama número del matrimonio. Por lo tanto, la aparición de esta arcano lleva al hombre no sólo a enfrentarse a la dura prueba de escoger su propio camino, sino también al amor como búsqueda de la plenitud con el otro.
La escena que nos muestra El Enamorado es algo distinta a la de los arcanos que le preceden. Por primera vez en la serie del Tarot la figura central, en este caso el hombre, no tiene el tamaño gigantesco y la actitud arquetípica a los que nos tienen acostumbrados, por ejemplo, El Emperador o El Papa; por el contrario, El Enamorado aparece relacionado con los otros personajes en una actitud más natural y asequible. Con ello pone de manifiesto que con él penetramos en el mundo de lo humano.
Tres Bastos – Tres Copas – Tres Espadas – Tres Oros
Tres Bastos
Este arcano nos permite penetrar en el mundo de la ética y de la virtud. Representa al individuo seguro de sí mismo, en posesión de la capacidad de obrar desde el punto de vista del propio sentido ético, al margen de la opinión de los demás. Dicha persona es capaz de obtener beneficios, llevando a cabo lo que él, como individuo seguro de sus ideales, cree que tiene que hacer de acuerdo con su propia verdad interna.
El tres de bastos representa la capacidad de realizar proyectos de envergadura, o de implicarnos en la expansión de una idea o de una filosofía con entusiasmo y confianza, partiendo de las sólidas bases de nuestra ética personal.
Tres Copas
El tres copas permite al hombre la percepción de la abundancia en el Universo y le confiere el conocimiento de que todo deseo, toda necesidad, es la expresión de la capacidad de éste para colmarlos. El arcano representa la certeza de que la vida nunca concede un deseo sin otorgar también la capacidad de convertirlo en realidad.
Es la manifestación de don de saber disfrutar de la abundancia, así como también la fe y la esperanza de que todo es posible y de que el hombre que sabe pedir recibirá, ya que el Universo es infinitamente rico y generoso y en él hay para todos. Manifiesta la capacidad de ser generoso y de saber compartir.
Este arcano nos permite penetrar en el mundo de la ética y de la virtud. Representa al individuo seguro de sí mismo, en posesión de la capacidad de obrar desde el punto de vista del propio sentido ético, al margen de la opinión de los demás. Dicha persona es capaz de obtener beneficios, llevando a cabo lo que él, como individuo seguro de sus ideales, cree que tiene que hacer de acuerdo con su propia verdad interna.
El tres de bastos representa la capacidad de realizar proyectos de envergadura, o de implicarnos en la expansión de una idea o de una filosofía con entusiasmo y confianza, partiendo de las sólidas bases de nuestra ética personal.
Tres Copas
El tres copas permite al hombre la percepción de la abundancia en el Universo y le confiere el conocimiento de que todo deseo, toda necesidad, es la expresión de la capacidad de éste para colmarlos. El arcano representa la certeza de que la vida nunca concede un deseo sin otorgar también la capacidad de convertirlo en realidad.
Es la manifestación de don de saber disfrutar de la abundancia, así como también la fe y la esperanza de que todo es posible y de que el hombre que sabe pedir recibirá, ya que el Universo es infinitamente rico y generoso y en él hay para todos. Manifiesta la capacidad de ser generoso y de saber compartir.
Tres Espadas
Entre los treses de todos los palos de la baraja, el de espadas es el único que se nos presenta como negativo. Tal circunstancia se debe a la correspondencia del palo de las espadas con el elemento aire. En efecto, aunque el número 3 en sí mismo implica logros y una intensa pasión por crear (como en el caso del tres de bastos, o el arcano III, La Emperatriz), en este palo, de naturaleza mutable, el resultado de la creación aparece como inconsistente.
Con este arcano el hombre penetra en el mundo del dolor, que está regido por las leyes y limitaciones que ordenan las fuerzas dadoras de vida, sin las cueles ésta no sería posible.
Tres Oros
Este arcano nos muestra que, en realidad, el mundo material que percibimos no es más que el templo en el que mora el Espíritu y que, por tanto, la materia es de carácter sagrado, y el trabajo que el hombre realiza en ella, un acto mágico. El tres de oros alude a la concreción del pensamiento en una forma material, y nos avisa de que, para realizar un trabajo dentro del mundo de la materia, se precisan tres cualidades diferentes que tienen que actuar al unísono. Según los Iniciados, dichas cualidades son las mismas que necesita todo aspirante a mago: querer hacer una cosa, amar el conocimiento y tener capacidad para asumir el riesgo.
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