El camino del Tarot

(Texto extraído de “Aprender Tarot paso a paso” de Naomi Ozaniec. Ed. Océano)

“El tarot se utiliza mayormente para predecir el futuro, muchas veces en un plano puramente comercial. Sin perder de vista esta función, vamos a acometer un enfoque más profundo de su extraordinario sistema simbólico. El tarot puede concebirse como un libro sin palabras. Es un libro de imágenes. El poder de la imagen no debería sorprendernos en un mundo como el nuestro, en el que los iconos y los medios de comunicación visuales prevalecen sobre los demás. La diferencia entre las impresiones visuales y los dibujos del tarot es que las primeras son funcionales y perecederas, mientras que las del tarot son universales. La simbología del tarot es aplicable a todas las épocas. En ella confluye la cultura y el mito; el sol y la luna, la estrella y el arco iris; encontramos al viajero y al sabio anciano, a la madre naturaleza y al diablo. Encontramos la dinámica universal de la vida y la muerte, el amor y el fracaso. El tarot refleja las constantes humanas en un lenguaje universal: los símbolos. Éste es el camino del Tarot.

Estas constantes a menudo reciben el nombre de arquetipos. Son las pautas que subyacen a la existencia humana. Cuando las vemos en las cartas las reconocemos instintivamente. Del reconocimiento pasamos a la interacción. La interacción da lugar a respuestas, por lo que podemos examinar nuestra cotidianidad con una mirada más profunda para plantearnos los grandes temas existenciales. Esta experiencia nos enriquece y llena de sentido nuestra vida. La necesidad de abordarlo topa con la incapacidad del mundo contemporáneo de aportar respuestas. Ahora más que nunca, estamos condicionados por las hipotecas o por el desempleo. Vivimos en constante presión para conservar nuestro puesto de trabajo y asegurarnos un cierto nivel de ingresos. El desarrollo tecnológico nos permite comunicarnos con todo el globo, pero ¿sabemos lo que está sucediendo dentro de nosotros? ¿Queda un espacio para la búsqueda y la contemplación? ¿Tenemos tiempo para el ritual individual o colectivo? Hemos perdido los ritos con los que recordábamos y honrábamos lo sagrado. Estamos perdidos en un laberinto que hemos construido nosotros mismos. Pero aún así, no hemos olvidado el rostro de la madre, el héroe o el niño inocente. En algún rincón de nuestra mente se hallan ocultas estas figuras; todo lo que tenemos que hacer es ir a su encuentro…

El camino del tarot es el de la representación simbólica. Nos muestra básicamente símbolos y arquetipos. Exige que vayamos más allá de nuestra mente unidimensional y limitada para dar un salto espectacular hacia el lenguaje ilimitado del símbolo, el mito y la metáfora. Cada lámina tiene una historia que contar. A medida que te familiarices con los símbolos, tu comprensión de los mismos será mayor. Poco a poco irás aproximándote al corazón del tarot. Al entender el significado de un símbolo concreto, podrás leer el mensaje desde muchas perspectivas distintas…”

Nota:

Las bellísimas imágenes que se exponen proceden de:

http://rockytopstudio.com/nature-mandalas/

Autor: Allison Trentelman