En esta ocasión os propongo algunas orientaciones para dar respuesta a algunas de las preguntas que me habéis trasladado en relación al tema de los Arcanos de la corte. Se trata de una visión más que podéis incorporar en el estudio y comprensión de estos arcanos. Para ello nos vamos apoyar en el Análisis Transaccional. Si alguien se anima a profundizar, podrá comprobar la estrecha relación que existe entre lo que propone el análisis transaccional y los arcanos de la corte del Tarot.
Consideraciones Previas
Todos los arcanos pueden representar tanto a personas como a situaciones concretas. Aquí nos centraremos en el plano personal y psicológico.
Todos los arcanos pueden representar tanto a hombres como a mujeres, tanto a jóvenes como a adultos.
No hay arcanos mejores o peores.
Aunque cada arcano va asociado a un elemento o palo (bastos=fuego; copas=agua; espadas=aire; oros=tierra), esto no implica que el resto de elementos estén ausentes. Por ejemplo, la presencia del arcano de la Reina Esp. Representando a alguien, no implica que dicha persona carezca de sentimientos, aunque manifieste una inclinación hacia el plano mental (Espadas=aire). Esto es fácilmente observable en la vida diaria. Las personas no se definen en función de un solo aspecto.
Una fórmula que nos puede ayudar a comprender a este grupo de arcanos es considerarlos o verlos como diferentes formas de relacionarnos, de actuar, de comunicarnos, de enfocar la vida o una situación determinada, de expresar o canalizar los sentimientos o emociones etc.
Análisis Transaccional
Para aquellos que no conozca el Análisis Transaccional, comentaros que se trata de una de las Teorías de la Personalidad propuesta por el psiquiatra Eric Berne que se encuadra dentro de lo que se ha denominado Psicología Humanística.
Según Berne cada uno de nosotros actúa, se comunica y se relaciona de 3 modos diferentes: a veces como un niño, a veces como un adulto y a veces como un padre. Estos 3 modos de ser fueron llamados por Berne: Estados del Yo.
Por lo tanto tenemos:
“El estado del Yo Padre” que estaría representado por los Reyes y las Reinas del Tarot y nos “indican lo que debemos hacer”. Algunas funciones que podemos encuadrar dentro de este estado son: la protección, la educación, el consejo, la ayuda, el castigo, la obligación, la exigencia, la crítica, la corrección, la imposición, el mandato…Igualmente estas características se pueden manifestar de forma cariñosa bajo un Rey o Reina Copas, bajo una forma severa o rígida en el caso de un Rey o Reina Esp. Etc.
“El estado del Yo Adulto” que estaría representado por los caballeros del Tarot. Tradicionalmente en el Tarot se ha asociado a estas figuras a los “jóvenes adultos” o “adultos”. Y como adulto sabe lo que le conviene. Algunas características de este estado son. El análisis, el cálculo, la comparación, la planificación, la observación, la información, la aceptación, la responsabilidad etc.
“El estado del Yo Niño” que estaría representado por las Sotas del Tarot y cuya inclinación es hacer lo que quiere y lo que le gusta. Algunas características de este estado son: la escasa experiencia y conocimientos, la espontaneidad, el juego, la provocación, la competición, la rebeldía, el juego, la fantasía etc.
Estos 3 estados conviven dentro de cada uno de nosotros con independencia de nuestra edad, y según el contexto y la situación haremos uso de uno u otro estado. No se trata de analizar si es bueno, malo o regular hacer uso de un determinado estado, sino de si determinado uso de “Estado del Yo”, se adecua al contexto o situación. Es decir, los términos niño, adulto y padre tenemos que entenderlos como una actitud o conducta.
Con un par de ejemplos lo veremos claro… Cuántas veces hemos oído decir refiriéndonos a un adulto…tal persona se comporta como un niño, es un inmaduro o tiene una actitud muy infantil. O cuantas otras hemos oído decir acerca de un niño o adolescente… es muy responsable… es muy maduro para su edad. Con esto queda claro la flexibilidad de dichos estados.